El aula escolar tiene una finalidad establecida que va más de una rutina y un protocolo establecido en el caso de las aulas con retos de aprendizaje las estrategias están orientadas a incrementar las competencias, a favorecer la independencia y llegar a la conquista del aprendizaje real, funcional y con usabilidad de toda la información posible.
Entre esas conquista esta una metodología basada en optimizar las competencias comunicativas, seguir un plan secuencial de metas entre todos los responsables del proceso, establecer un procedimiento de rutinas y subrutinas con seguimiento tutorizado para el mejoramiento progresivo de todo el proceso educativo con sentido y significancia.
Para ello es necesario:
- Planificar las metas que se quiere obtener desde un inicio.
- Concretar entre la familia – docente – escuela los puntos de partida.
- Hacer una revisión crítica sobre la contextualización de cada contenido.
- Hacer énfasis en los contenidos que puedan generar mayor impacto en la cotidianidad del estudiante.
- Conocer que relaja al estudiante y que aspecto los estresan o angustian en el aula de clases.
- La experiencia siempre tiene que estar acompañada de la destreza escritora que los motive a expresar lo comprendido.
- Recalcar los procedimientos desde los movimientos de las letras, lenguaje gráfico y sonoro, todo esto de forma creativa.
- Permanente instalación de la una biblioteca móvil, creativa con muchas oportunidades para mirar, pensar y hacer en la que no existan restricciones.
Aprender a leer se logra desde el movimiento, imitando formas, figuras, las formas de las hojas, las silueta del rio, los movimiento de los peces, los cantares de los árboles; esa es la forma de activar los neurotransmisores como: la noradrenalina, la dopamina y la serotonina, facilitando el aprendizaje con placer.
Hay que tener presente los momentos óptimos de atención de los estudiantes y usarlos de forma efectiva, no es necesario tener mayores conocimientos sobre el funcionamiento del cerebro para atender estos aspectos (atención, concentración, memoria, percepción).
Si aprendemos con placer las respuestas en la discriminación visual, auditiva las destrezas motoras finas (como el agarre), las competencias lógico espacial, espacio temporal, la resolución de problemas reales, atención, cooperación y colaboración entre el grupo es evidente. Para leer con placer el estudiante con discapacidad o sin ella necesita reír, mirar, pensar y disfrutar.
No hay mejor aprendizaje el que te hace sentir y emocionarte.
Espero que este post les sirva para reflexionar que enseña se logra cuando tu aprender a valorar, motivas y sentir.